La falta de motivación conduce a la procrastinación. Prueba estos consejos para aprender a dejar de ser perezoso y ayudarte a fijar objetivos.
¿Por qué me siento tan desmotivado? ¿Cómo puedo mejorar?
La mayoría de las personas experimentan falta de motivación en algún momento de su vida. Si estás estancado, no eres el único. Muchas tareas diarias podrían ser mucho más fáciles con la motivación adecuada para abordar tu lista de tareas pendientes. La procrastinación y gestión inadecuada del tiempo pueden dificultar hasta la tarea más sencilla. Por desgracia, no siempre es posible motivarse para cada tarea.
Hay muchas razones diferentes por las que no puede encontrar los niveles de energía para llevar a cabo sus tareas importantes. Entender su causa raíz es un buen primer paso. Afortunadamente, hay formas de aumentar tu motivación y aprender a dejar de ser perezoso cuando necesitas ser más productivo.
Comprender la desmotivación
Antes de sumergirnos en las estrategias, demos un paso atrás y entendamos qué causa la desmotivación, siendo una de las causas comunes la falta de objetivos fijados. Es esencial entender que la desmotivación no es un signo de debilidad o pereza, sino más bien una parte natural de la experiencia humana. Todos pasamos por fases en las que nos sentimos poco inspirados, desmotivados y desmotivados. Tal vez, la pandemia haya aumentado el número de desmotivados estudiantes y adultos por igual, debido al cambio en el entorno laboral.
Es importante reconocer que la desmotivación no es una experiencia única. Algunas personas pueden experimentarla con más frecuencia que otras, y la gravedad puede variar de una persona a otra. La desmotivación también puede manifestarse de distintas formas, como falta de energía, interés o entusiasmo. También puede surgir debido a objetivos poco realistas fijados por las personas o los miembros de su equipo.
La ciencia detrás de la desmotivación
Las investigaciones han demostrado que nuestro cerebro libera una sustancia química llamada dopamina cuando conseguimos un objetivo o hacemos algo que nos hace felices. Esta sustancia química es responsable de las sensaciones de placer y recompensa que experimentamos. Cuando nos falta motivación, también nos falta dopamina, lo que puede provocar sentimientos de fracaso y negatividad.
Esto podría ser especialmente cierto en un entorno laboral en el que el espacio de trabajo no es propicio para sacar lo mejor de ti. Es fundamental reconocer que esta falta de dopamina no es culpa tuya. Nuestro cerebro está programado para buscar el placer y evitar el dolor, y cuando no recibimos la recompensa esperada, nuestra motivación puede resentirse. Sin embargo, hay formas de superar esta falta de motivación.
Posibles causas de la falta de motivación
Hay muchas causas posibles para sentirse desmotivado. Descubrir la causa de fondo será de gran ayuda para acabar con este estilo de vida improductivo. A veces, dejar las cosas para el final del día no tiene nada que ver con tu ética laboral o tu estilo de vida. Puede ser otra cosa. Si con frecuencia sientes falta de motivación, echa un vistazo a las siguientes posibles causas y comprueba si alguna se aplica a tu caso.
Falta de inspiración
Si el trabajo o la tarea que tiene entre manos le deja sin inspiración, una respuesta típica puede ser dejarla para el día siguiente. Sin embargo, esto no siempre es posible. Las tareas importantes con plazos de entrega deben llevarse a cabo independientemente de tu nivel de interés. Si no te aportan ninguna alegría o no hay una recompensa asociada a ellas, puede ser fácil perder el interés en ellas. Esto es especialmente cierto en el caso de quienes se sienten en un callejón sin salida. El agotamiento laboral suele dejar a los empleados sin inspiración.
Sentirse abrumado
Tener demasiadas cosas que hacer o no entender del todo las tareas que tienes que realizar puede hacer que te sientas abrumado por la situación. Una vez abrumado, los pensamientos negativos pueden colarse, abriendo la puerta a la autoconversación negativa. En esta situación, es fácil perder toda la motivación. El miedo al fracaso puede crear la sensación de estar abrumado.
Baja energía
Trabajar demasiado puede provocar falta de motivación. El número de horas que duermes puede afectar negativamente a tus niveles de energía. Un cuidado personal inadecuado, como no descansar lo suficiente, puede hacer que te sientas demasiado cansado para hacer mucho. Toma nota si tu plan de acción te deja exhausto. El estrés, en tu vida personal y profesional, puede hacer que te sientas constantemente cansado.
Depresión
La falta de motivación puede ser un signo de depresión. La depresión puede causar dudas sobre uno mismo, baja autoestima y pensamientos negativos, haciendo que incluso los pequeños pasos resulten difíciles. La salud mental positiva desempeña un papel importante en la motivación.
Identificar sus desencadenantes personales
Ahora que conocemos las causas y los efectos de la desmotivación, centrémonos en identificar los factores desencadenantes personales. Identificar tus desencadenantes personales te ayudará a prevenir futuros ataques de desmotivación. Por ejemplo, si cree que suele sentirse desmotivado cuando se le encomiendan tareas monótonas, es importante que incorpore variaciones a su rutina.
Autorreflexión y diario
El primer paso para identificar sus desencadenantes personales es practicar la autorreflexión. Tómese tiempo para reflexionar sobre sus experiencias pasadas e identificar las situaciones en las que se sintió desmotivado. Escribir tus pensamientos y sentimientos en un diario puede ayudarte a ganar claridad e identificar patrones en tu comportamiento. Los podcasts también pueden ser útiles para comprender por qué te sientes desmotivado.
Reconocer patrones de comportamiento
Una vez que hayas dedicado tiempo a reflexionar sobre tus experiencias pasadas, presta atención a los patrones de tu comportamiento. Por ejemplo, utilizando una función de búsqueda avanzada en tu mente, intenta recordar situaciones que te hayan hecho sentir desmotivado. ¿Suele sentirse desmotivado después de trabajar muchas horas? ¿Ciertas tareas le hacen sentirse más desmotivado que otras? Identificar estos patrones puede ayudarte a desarrollar estrategias para prevenir futuros ataques de desmotivación.
Buscar la opinión de los demás
Por último, busca la opinión de los demás. Sus amigos y familiares pueden tener una visión de su comportamiento que usted mismo no ve. Pedir opiniones a otras personas puede ayudarte a obtener una perspectiva externa y a identificar factores desencadenantes que quizá hayas pasado por alto.
Por ejemplo, podrías pedirles que te comentaran tus tareas más importantes o las cosas que más les importan. También podrías utilizar frases de ejemplo para aclararles tus sentimientos o experiencias, y ellos podrían aportar su punto de vista utilizando sinónimos y antónimos para ayudarte a comprender los distintos puntos de vista.
Cómo aumentar la motivación
Afortunadamente, hay muchas formas de aumentar la motivación. Una vez que haya determinado su causa raíz, es mucho más fácil poner fin al ciclo. Aquí tienes algunas sugerencias sobre cómo mejorar tu falta de motivación.
Crear objetivos alcanzables
Una de las causas de sentirse desmotivado puede ser el establecimiento de objetivos inalcanzables. Si tiene demasiadas cosas en la cabeza, no conseguirá nada. Mantener objetivos alcanzables pero que supongan un reto no sólo le ayudará a seguir avanzando, sino que también le ayudará a optimizar su tiempo. Muchas personas de éxito se fijan objetivos a largo plazo que tienen una recompensa al final para aumentar su motivación.
Uno de los métodos más citados para crear objetivos es convertirlos en objetivos SMART: específicos, medibles, alcanzables, relevantes y basados en el tiempo (o con un plazo determinado).
Elimine el estrés
Aunque hay algunas situaciones en las que el estrés puede ayudar a motivar, en exceso puede afectar a tu bienestar. Hacer scroll inútilmente en las redes sociales puede llevarte a pensamientos negativos que te provoquen más estrés. Asegúrate de que duermes las horas adecuadas y presta atención a tu salud mental. Eliminar las causas de estrés innecesario puede aumentar los niveles de energía.
Utilice la técnica Pomodoro
Esta técnica utiliza la idea de “timeboxing”. El “timeboxing” consiste simplemente en asignar cantidad fija de tiempo para trabajar en un proyecto. Esto ayuda a garantizar que no te desvíes de la tarea, pero también que estés completamente concentrado en una actividad a la vez. Esta técnica te ayuda a mantener la concentración. Así es como funciona:
- Elige una tarea en la que trabajar.
- Programa un temporizador para 25 minutos.
- Trabaja en la tarea hasta que se apague el temporizador.
- Tómate un descanso de 5 minutos.
Después de cuatro sesiones de 25 minutos, tómate un descanso de 15 minutos.
Crear un sistema de apoyo
Crear un sistema de apoyo formado por amigos, familiares o incluso un entrenador puede ayudarte a mantener la motivación. Tener a alguien que te haga responsable y te anime en el camino puede ser increíblemente beneficioso para superar la desmotivación.
Por ejemplo, si estás intentando empezar un nuevo hábito, busca un amigo que tenga un objetivo similar y comprométanse a hacerlo juntos. Podéis veros regularmente para manteneros motivados y responsabilizaros mutuamente.
Opciones alimentarias
Un cuidado personal adecuado es crucial para mantener una vida laboral y personal saludable. Dejar de ser perezoso puede ser tan sencillo como alimentarse adecuadamente y hacer ejercicio para mantener altos los niveles de energía. Puede que pienses que una bebida energética te ayudará a mantenerte motivado, pero ese impulso temporal te llevará a un bajón.
Desarrollar una mentalidad de crecimiento
Desarrollar una mentalidad de crecimiento puede cambiar tu vida. Te ayuda a mantener la motivación ante los altibajos de la vida. Una mentalidad de crecimiento es la creencia de que nuestras capacidades pueden desarrollarse y mejorarse con el tiempo. Es la idea de que podemos crecer y aprender de nuestras experiencias, fracasos y éxitos.
Aceptar los retos y las oportunidades de aprendizaje
Cuando afrontamos los retos con una mentalidad de crecimiento, los vemos como oportunidades para crecer y aprender. En lugar de rehuirlos o sentirnos derrotados, podemos aceptarlos y verlos como oportunidades para mejorar. Cuando nos desafiamos a nosotros mismos, salimos de nuestra zona de confort y aprendemos nuevas destrezas y habilidades. Esto puede darnos más confianza en nosotros mismos y una sensación de logro.
Por ejemplo, si estás intentando aprender un nuevo idioma, puede que al principio te resulte difícil. Pero si lo afrontas con una mentalidad de crecimiento, puedes verlo como una oportunidad para ampliar tus conocimientos y mejorar tus habilidades comunicativas.
Cultivar la resiliencia
La resiliencia es la capacidad de recuperarse de los retos y la adversidad. Cuando tenemos resiliencia, podemos superar obstáculos y seguir motivados, incluso ante la adversidad. Cultivar la resiliencia es una habilidad que puede desarrollarse con el tiempo.
Una forma de cultivar la resiliencia es practicar el autocuidado. Cuidarse física, mental y emocionalmente puede ayudar a desarrollar la resiliencia y hacer frente al estrés. Esto puede incluir dormir lo suficiente, seguir una dieta sana, hacer ejercicio con regularidad y practicar la atención plena o la meditación.
Celebrar las pequeñas victorias
Celebrar las pequeñas victorias a lo largo del camino es crucial para mantener la motivación. Las pequeñas victorias pueden contribuir a una sensación de logro y mantenernos motivados para seguir trabajando hacia nuestros objetivos. Es esencial reconocer y celebrar los progresos, por pequeños que parezcan.
Por ejemplo, si está trabajando en un gran proyecto, puede dividirlo en tareas más pequeñas. Cada vez que complete una tarea, dedique un momento a reconocer y celebrar sus progresos. Puede ser algo tan sencillo como tomarse un descanso de cinco minutos para hacer estiramientos o darse un capricho con su tentempié favorito.
En general, la desmotivación es una parte natural de la vida, pero puede superarse con las estrategias y la mentalidad adecuadas. Identifica tus desencadenantes personales, desarrolla estrategias para superar la desmotivación y cultiva una mentalidad de crecimiento. Y recuerda que los pequeños pasos conducen a logros significativos y te mantienen motivado en el camino.
Motívate escuchando a Speechify
Speechify es un texto a voz que permite a los usuarios escuchar textos. Esto puede mejorar la retención de información y reducir potencialmente el estrés. Si no estás lo suficientemente motivado para leer un documento de trabajo necesario, Speechify puede leértelo. Esto puede ayudarte a avanzar y completar tareas importantes y puede reducir los niveles de estrés y el agotamiento laboral.
Si tienes dificultades para mantener el interés en los documentos relacionados con el trabajo, Speechify te ofrece la posibilidad de cambiar la voz del lector. Imagina tener a Gwyneth Paltrow te lea tu informe de ventas. Sin duda, esto podría aumentar tu motivación para hacer el trabajo.
Speechify tiene muchos audiolibros disponibles que pueden ayudarte a recuperar tu motivación, incluidos algunos que cubren los hábitos de las personas de éxito.
Speechify puede ayudarte a optimizar tus tareas diarias y rejuvenecer tus niveles de motivación. Prueba Speechify ahora y comprueba cómo puede ayudarte a aumentar tu motivación y productividad.
Preguntas frecuentes
¿Cómo se solucionan los sentimientos de desmotivación?
Eliminar el estrés innecesario, elegir alimentos sanos y dormir las horas adecuadas son formas de dejar de sentirse desmotivado.
¿Por qué lucho contra la falta de motivación?
La falta de motivación puede deberse a varias razones. Los objetivos poco realistas, la sensación de agobio o cansancio y la depresión son algunas de las razones más comunes.
¿Y si persiste mi falta de motivación?
Si su falta de motivación persiste a pesar de sus esfuerzos, puede resultarle útil buscar apoyo adicional. Considere las siguientes opciones:
- Habla con un profesional: Acude a un terapeuta, consejero o entrenador que pueda ayudarte a explorar los problemas subyacentes y proporcionarte orientación adaptada a tu situación.
- Busca la rendición de cuentas: Busca un compañero que te rinda cuentas o únete a un grupo de apoyo en el que puedas compartir tus luchas y recibir ánimos. Tener a alguien con quien hablar puede ayudarte a mantener la motivación.
- Reevalúe sus objetivos: Reflexiona sobre tus objetivos y evalúa si siguen estando en consonancia con tus intereses y valores. Puede que sea necesario ajustar o redefinir tus objetivos para recuperar la motivación.
- Tómate un descanso: A veces, tomarse un breve descanso puede ayudar a recargar tu motivación. Participa en actividades que te aporten alegría y relajación, y date tiempo para rejuvenecer.
Recuerda que es normal experimentar fluctuaciones en la motivación y que el camino de cada persona es único. Sé paciente contigo mismo, practica la autocompasión y permanece abierto a explorar nuevas estrategias hasta que encuentres lo que mejor te funciona.