Asesinatos y narcotrafico, policias y carteles. Nadie es inocente. El inspector Dolores Morales y el subinspector Bert Dixon, del Departamento de Narcoticos de la policia nicaraguense, y antiguos guerrilleros, investigan la desaparicion de una mujer; las unicas pistas son un yate abandonado en la costa de Laguna de Perlas, sospechoso de transportar drogas, un libro quemado y una camiseta ensangrentada (mas tarde apareceran una valija con cien mil dolares y un vestido de novia). Los detectives crean una insolita red de espionaje en la que participan por igual la DEA y dona Sofia, afanadora de la Policia. Las cosas se ponen candentes cuando ocurre una serie de asesinatos, entre ellos el del principal testigo. En esta novela policiaca, narrada con tension e ironia, y donde la sorpresa salta en cada pagina, las fuerzas del bien son a veces las fuerzas del mal. Sergio Ramirez explora los resquicios de esas fuerzas, por donde corre impetuosa la vida.

Sergio Ramirez logra resumir toda la historia de su pais en una metafora de realidad y leyenda. El relato esta estructurado en dos niveles distintos y en la misma ciudad: uno, en 1907, durante un homenaje rendido a Ruben Dario en el cual este escribe en el abanico de una nina el poema “Margarita, esta linda la mar …”; el otro, en 1956, en un cafe en el que se reune una tertulia literaria en la que tambien se conspira. Durante una visita a Leon (Nicaragua) de Anastasio Somoza y su esposa, habra un atentado contra la vida del dictador. La nina del abanico, cincuenta anos despues, no sera ajena a los hechos. Una novela cuyo lenguaje brillante y poetico, lleno de humor e ironia, seduce al lector y crea un continuo temporal entre el pasado y el presente.

Esta obra nos lleva a traves de la historia de las fotografias que el fotografo Castellon toma durante los tiempos de la guerra en Europa y los tiempos de paz en Nicaragua, pasa de un episodio a otro desde la naciente Nicaragua, un ghetto en Varsovia, o a un monasterio en Mallorca y muchos mas. Asi como tambien mencionando a un sin numero de personajes de la historia universal con los que tiene algun contacto el fotografo Castellon, como el mercenario Walter, Napoleon el pequeno, Turgueniev, Flaubert y George Sand, la misma reina Victoria y personajes tales como Wenceslao Vivorny y el archiduque Luis Salvador. Ademas hay pasajes de la historia donde vemos caer y surgir ideales, suenos y grandes negocios. No podemos dejar de mencionar la aparicion de Chopin y Ruben Dario en la misma historia.

Nicaragua, 1979. Ante la inminente caida de la dictadura somocista, Alirio Martinica trata de huir por mar. Es aprehendido por jovenes combatientes del Frente Sandinista y llevado a juicio popular, acusado de participar, directa o indirectamente, en acciones criminales del regimen de Somoza, de quien llego a ser secretario privado, “hombre todopoderoso en las sombras”, hasta que hacia 1976 lo echaron del circulo intimo en medio de confusas circunstancias. Ante sus jueces, todo un pueblo reunido en asamblea al aire libre, que con sus aplausos o su silencio dictaminara libertad o paredon, Alirio expondra las razones por las que debe perdonarsele; quiza cuente que cuando joven anhelaba para su pais una revolucion sin sangre, y que ya siendo funcionario de Somoza escondio en casa a su amigo el comandante sandinista Ingnacio Corral, pese a los terribles riesgos. Las minucias, errores, abusos, injusticias, se entierran en el olvido cuando hay acontecimientos tan variados y vertiginosos como los que ocurren en una revolucion, y muchos actos heroicos corren la misma suerte, aunque hayan servido de palanca al salto de la historia. En esta novela, Sergio Ramirez coloca al lector ante ese salto y le da elementos para juzgarlo.